test de velocidad

Si echamos la vista atrás y vemos cómo eran nuestros dispositivos tecnológicos hace unos años, con total seguridad notaremos grandes cambios. Pero sin duda uno de los más destacados y que cada vez está más presente en la tecnología es Internet. Antes solo teníamos conexión en ordenadores, quizás en algún PDA y posteriormente en los móviles. Hoy en día eso ha cambiado significativamente y ahora podemos tener conexión desde la televisión, Tablet y una gran variedad de lo que conocemos como el Internet de las Cosas. En concreto son 22.000 millones de dispositivos conectados a la red. ¿Cuántos habrá en unos años?

Más de 22.000 millones de dispositivos conectados a Internet

Nos hacemos eco de un informe que muestran en HelpNetSecurity.  Podemos decir que hay casi 4 dispositivos conectados a Internet por cada habitante. Sin duda son datos más que significativos y que irán en aumento en los próximos años.

Si pensamos en lo que tenemos en nuestra casa, seguro que la media incluso se supera. Hoy en día no solo tenemos un ordenador conectado a Internet; es probable que haya varios en una vivienda (ordenador de sobremesa, portátiles…). También puede ser que haya varios móviles, alguna Tablet, televisiones… Incluso lo que conocemos como el Internet de las Cosas, que será sin duda lo que más aumentará en los próximos años.

Con esto podemos incluir una gran variedad de dispositivos. Relojes inteligentes, neveras, bombillas… Pero además otros muchos productos que aún no conocemos pero que formarán parte de nuestra vida próximamente.

Estos datos se ven más claro si ponemos sobre la mesa información de hace unos años. Si nos vamos a 2009, hace 10 años, vemos que apenas había 3.000 millones de dispositivos conectados a Internet en todo el mundo. Básicamente uno por cada dos habitantes del mundo. En tan solo una década hemos multiplicado por 7 esa cifra.

Sin duda la tecnología avanza y nuestras redes están más capacitadas para responder a la alta demanda. Un ejemplo son los routers que tenemos en casa. Hace unos años (ya unos cuantos, eso sí) un router solo tenía conectividad por cable para dar señal a 1, 2 o como mucho 4 dispositivos conectados. No era normal que tuvieran Wi-Fi ya que tampoco había muchos dispositivos compatibles. Pronto aparecieron los routers que sí traían conectividad inalámabrica, aunque no podían responder a una alta demanda, ya que eran limitados.

Pero ahora un router moderno, el que podemos tener cualquiera en nuestra casa, puede admitir que conectemos decenas de dispositivos al mismo tiempo sin sufrir problemas. Eso sí, a menos que cada uno de esos equipos esté consumiendo un gran ancho de banda y provoque problemas de conexión y velocidad.

En menos de una década duplicaremos la cifra

En definitiva, en una década hemos multiplicado por 7 la cantidad de equipos conectados a la red. ¿Qué nos depara el futuro? Según este mismo estudio del que nos hacemos eco, en poco más de 5 años alcanzaremos la cifra de 38 mil millones de dispositivos conectados. Esto significa más de 4.000 millones por año, una cantidad absoluta mayor de lo que teníamos hace solo una década, y cada año.

Pero si miramos aún más lejos, a 2030, podríamos superar los 50 mil millones de equipos conectados a la red. Estamos hablando de que en cuestión de 6-8 años duplicaremos la cifra actual. Nuestros hogares cada vez estarán más conectados y haremos uso de dispositivos más variados.

Especialmente el informe indica que habrá cada vez más dispositivos “wereables”, como relojes inteligentes por ejemplo, así como vehículos conectados. El 5G, una tecnología que estará disponible próximamente, va a ser muy importante para poder soportar todo lo que estamos diciendo. Las redes inalámbricas hoy ya son muy importantes para los usuarios, ya que la mayoría de todas las conexiones no utilizan clave. Pero sin duda en los próximos años lo serán aún más.

Nuevos dispositivos a la vista

¿Qué nuevos dispositivos o tecnología podremos ver en los próximos años con Internet? La verdad es que estamos viendo una transformación muy importante en este sentido. Hace unos años podría parecer una locura tener un reloj con Internet o tener una nevera con conexión Wi-Fi donde poder ver si nos falta algún tipo de producto. Esto ya es una realidad y la tendencia es que cada vez más viviendas cuenten con electrodomésticos conectados a Internet.

La cuestión principal es que en los próximos años irán apareciendo más y más dispositivos conectados a Internet. Muchos de ellos ya existen y estarán más presentes entre los usuarios. Pero también otros muchos aún son desconocidos y aparecerán para satisfacer necesidades de los usuarios de las que aún no somos conscientes.

Sin duda habrá que contar con una conexión a Internet estable, fiable y con una buena velocidad. Hacer un test de velocidad en los próximos años con total seguridad no tendrá nada que ver con lo que obtenemos ahora en cuanto a resultados, ya que tendrán que adaptarse las operadoras a los nuevos tiempos y a lo que requiere tener tantos dispositivos conectados al mismo tiempo.

Las redes inalámbricas, cada vez más importantes

Hemos explicado que la cantidad de dispositivos conectados a Internet se va a multiplicar en los próximos años. Cada vez tenemos más y más aparatos en nuestros hogares, vehículos con conexión a la red, dispositivos móviles para acceder desde cualquier lugar… Ahora bien, si hay algo que ha cambiado mucho en los últimos años es la tecnología que usamos para conectarnos. Atrás quedó el cable, algo que aunque seguimos utilizándolo para conectar ordenadores o televisiones al punto de acceso, lo cierto es que ha bajado mucho su uso.

Si pensamos en cómo nos conectamos a Internet en la actualidad, la mayoría lo hacemos de forma inalámbrica. Móvil, tablets, reproductores de vídeo, ordenadores portátiles… Todos estos dispositivos cuentan con tecnología Wi-Fi o redes móviles que nos permiten navegar por la red sin necesidad de utilizar cableado en ningún momento.

También, para poder adaptarse a los tiempos y cumplir las expectativas y necesidades de los usuarios, las redes inalámbricas van a tener que mejorar en los próximos años. Es lógico pensar que tecnologías como el 5G van a ayudar en gran medida a que esa conectividad sea la adecuada, nos aporte una buena velocidad, latencia baja y, en definitiva, estabilidad.

Por tanto, podemos decir que las redes inalámbricas cada vez van a ser más importantes. Cada vez van a estar más presentes en nuestro día a día y tendremos más equipos que se pueden conectar sin necesidad de hacer uso del cable de red. Dispositivos del Internet de las Cosas, como hemos visto, van a estar muy presentes en nuestras vidas. Tendremos hogares cada vez más conectados.