¿Qué son los Mbps / Gbps de Internet?

¿Qué son los Mbps / Gbps de Internet?

Estamos acostumbrados a ver la abreviatura Mbps al lado de un número a la hora de contratar una conexión a Internet. 50 Mbps, 300 Mbps e incluso, 1 Gbps. Todas estas cifras hacen referencia a la velocidad de descarga que tendremos, ya que la velocidad de subida o carga rara vez se anuncia. Pero ¿qué son los Mbps de Internet?, ¿cuál es el significado de Kbps? Vamos con un repaso de unidades de velocidad en Internet.

Cada vez que contratamos el servicio de Internet con alguna operadora, lo primero en que nos fijamos es la velocidad que vamos a contratar, 100, 300, 600 megas o incluso 1 giga. Pero, ¿sabemos a qué serefieren estas velocidades? Puede que estemos contratanto un servicio y que no sepamos qué vamos a recibir ni qué significan esos términos o incluso que contratemos un servicio al que no vamos a sacarle el rendimiento necesario y acabemos pagando de más. Para ello debes tener claro qué son los Mbps o los Gbps.

Diferentes velocidades de Internet para cada usuario

Lo primero que debes entender es que no todos los usuarios necesitan la misma velocidad de conexión ya que, en función del uso que le des a tu red de Internet, necesitarás más o menos Mpbs. No es lo mismo utilizar tu WiFi para navegar por Internet y acceder a redes sociales que querer ver películas en 4K a través de plataformas de streaming o disfrutar de servicios como Google Stadia que requieren una velocidad de conexión mucho más alta. Y aquí entra la pregunta del millón: ¿qué velocidad de Internet deberías contratar?

Contratar fibra de 300, 600 o 1000 Mbs

Lo cierto es que en función del uso que le des a tu red WiFi vas a necesitar más o menos megas. Para empezar, si lo que quieres es tener una conexión a Internet en casa para navegar, usar redes sociales, que todos los aparatos de tu hogar tengan acceso a la Red y poco más, con 300 Mb vas a disfrutar de la mejor experiencia.

Fibra óptica

En el caso de que juegues online o quieras ver películas y series en 4K a través de plataformas de contenidos bajo demanda como Netflix, lo mejor es apostar por 600 Mb. Ten en cuenta que, aunque en principio con 300 Mb tendrías suficiente, al haber varias personas en casa te recomendamos apostar por una conexión superior.

¿Y en qué casos hace falta 1 Gbps o 1000 Mbs? Pues lo cierto es que hay situaciones muy concretas en las que puedes necesitar unas velocidades de conexión tan altas. Principalmente si tienes un servidor interno o NAS y quieres evitar cuellos de botella o si sois varios los miembros del hogar que jugan en streaming o quieren ver contenidos 4K por Internet.

Conexiones domésticas de más de 1 Gbps

Con el paso del tiempo hemos visto como la velocidad que podemos contratar ha ido en aumento. Actualmente, con muchos operadores ya podemos contratar 1 Gbps de ancho de banda para nuestra red doméstica. Pero ¿Cuándo veremos tarifas de mayor capacidad? Lo cierto es que esto es cada vez más factible, sobre todo gracias a los avances tecnológicos en las infraestructuras actuales de Internet y Fibra óptica. Los proveedores invierten mucho dinero en mejorar su red, y así poder satisfacer la demanda de velocidad. La cual no para de crecer de forma exponencial.

Actualmente las conexiones de 1Gbps son una realidad, y muchos usuarios ya las han contratado para sus hogares. Para poder satisfacer esta demanda, los ISP han desplegado infraestructuras de fibra óptica que pueden manejar estas capacidades. Está claro que en estos casos es totalmente necesaria la fibra óptica, pues con otros cableados puede ser más complicado llegar a esas velocidades de forma estable. Estos mismos cables, son los que van a dar la posibilidad de disponer de una capacidad superior a 1 Gbps.

En cambio, nos encontraremos con algunos factores que afectan a la disponibilidad de estas velocidades tan altas. Sobre todo, nos referimos a zonas rurales o alejadas. En estos casos el despliegue puede ser muy costoso, pero es algo que actualmente ya se está subsanando. Los proveedores de servicios, se han tomado muy en serio el despliegue para que todos los lugares puedan acceder a estas nuevas tecnologías. Todo esto, hace que sea muy probable ver velocidades superiores a 1 Gbps más pronto que tarde. Pero esta también será más eficiente, ya que la tecnología sigue mejorando y será necesario para poder satisfacer la gran demanda de fibra óptica que hay actualmente. Ocurriendo así tanto en hogares como en entornos de trabajo.

¿Merecen la pena 1 Gbps o 10 Gbps?

Aunque comercialmente suena muy bien, la verdad es que, en la práctica, no va a merecer la pena. Salvo para algunos casos contados, no vamos a saber cómo aprovechar correctamente este ancho de banda, y esto lo saben bien las operadoras, ya que ofrecen esta velocidad sabiendo que no van a tener todo el ancho de banda ocupado.

Con 1 Gbps vamos a tener más que suficiente para compartir la conexión con 4 miembros, o más, de la familia, y que todos a la vez hagan un uso intensivo de ella. Pero 10 Gbps ya son palabras mayores. Esta conexión sí que es totalmente innecesaria, ya que es literalmente imposible aprovechar su velocidad por varios factores. El primero de ellos es que el Wi-Fi no lo alcanza, y el cable, salvo en dispositivos muy concretos (como un NAS), tampoco. Además, los servidores de descarga tampoco soportan este ancho de banda. Por lo tanto, aunque la conexión sea (en teoría) de 10 Gbps, no va a haber forma de aprovecharla.

Qué velocidad de conexión ofrecen los principales operadores

Queremos aprovechar para dejaros un listado donde encontrarás las diferentes ofertas de conexión que ofrecen los principales operadores de Internet en nuestro país, actualizado a fecha de marzo de 2024:

  • Adamo: 400 Mbps o 1000 Mbps (1 Gbps).
  • Digi: 500 Mbps, 1000 Mbps (1 Gbps) o 10,000 Mbps (10 Gbps).
  • Euskaltel/R Cable/Telecable: 1000 Mbps (1 Gbps).
  • Finetwork: 100 Mbps, 300 Mbps y 600 Mbps.
  • Jazztel: 300 Mbps, 600 Mbps y 1000 Mbps (1 Gbps).
  • Lowi: 300 Mbps, 600 Mbps y 1000 Mbps (1 Gbps).
  • MásMóvil: 500 Mbps y 1000 Mbps (1 Gbps).
  • Movistar: 300 Mbps, 600 Mbps y 1000 Mbps (1 Gbps).
  • O2: 300 Mbps, 500 Mbps y 1000 Mbps (1 Gbps).
  • Orange: 500 Mbps y 1000 Mbps (1 Gbps).
  • Pepephone: 300 Mbps, 500 Mbps y 800 Mbps.
  • Virgin Telco: 300 Mbps y 1000 Mbps (1 Gbps).
  • Vodafone: 300 Mbps, 600 Mbps y 1000 Mbps (1 Gbps).
  • Yoigo: 500 Mbps y 1000 Mbps (1 Gbps).

Como podemos ver, ya son muchos los operadores que apuestan por ofrecernos una conexión de fibra óptica de 1 Gbps. Con ella vamos a poder navegar a máxima velocidad al límite de lo que ofrecen la mayoría de las conexiones cableadas que podemos usar, ya que la mayoría de las tarjetas de red son de 1 Gbps.

Pero, además, Digi va un paso más allá, y es la única que ofrece 10 Gbps en su conexión de fibra. Este ancho de banda es prácticamente imposible de alcanzar hoy en día en cualquier entorno doméstico, por mucho que estemos varios viendo películas en streaming en 4K o jugando online. Ni siquiera para bajar archivos, ya que los servidores no darán tanto de sí.

Otras velocidades

El despliegue de fibra óptica cada vez llega a más lugares, pero esto no es el 100% en estos momentos. Muchos sitios siguen sin contar con una infraestructura de cableado para internet, la cual les pueda abastecer de velocidades muy altas. Es por ello que se puede utilizar algunas otras formas de disponer de conexión a internet en casa. Sobre todo, se trata de zonas rurales, la cuales se encuentras bastante apartadas. Pero lo cierto es que hasta hace apenas un par de años, tampoco muchos pueblos cercanos a grandes ciudades podían disfrutar de las velocidades de la fibra óptica. Por lo cual, siempre fue una dificultad añadida el querer desarrollar alguna tarea por internet en esos lugares.

Algunas compañías ofrecen servicios de internet para los hogares, mediante cobertura 4G. Esta llega por un router con una tarjeta SIM instalada, la cual puede proveer de conexión a ese lugar. Pero esto puede tener limitaciones. Aunque se trata de una red efectiva, en estos casos las velocidades son mucho menores. A esto le podemos sumar lo que supone que la señal se debilite, o se generen zonas de sombra debido a la geografía. Entonces se puede llegar a disponer de velocidades que rondan el mega de velocidad, o menos.

Esto hace prácticamente imposible que se pueda teletrabajar, por ejemplo. Pero, al fin y al cabo, dan un servicio que a día de hoy es prácticamente de primera necesidad. Por lo cual ya no son lugares totalmente desconectados. Pues incluso con cobertura 4G débil, es posible realizar algunas tareas básicas por internet. Incluso llegar a disfrutar de contenido online, aunque sea a calidades inferiores y no podamos conectar muchos más dispositivos.

Otras de las posibilidades que tenemos, son las conexiones WiMAX y satélite. Que pueden dar mejor resultado en según qué casos. Pero siguen siendo muy inferiores a lo que nos puede ofrecer la fibra óptica.

Tecnología XGSPON, las nuevas velocidades

Con la constante evolución de la tecnología, que cada vez exige velocidades de transmisión más elevadas, nos encontramos ante el problema de los límites de velocidad en nuestros dispositivos domésticos y en las redes de fibra óptica que, hasta ahora, solo permiten una velocidad de transmisión de hasta 1 Gbps. Este problema queda resuelto con la tecnología XGSPON, que multiplica por diez la capacidad de transimisión en una red de fibra óptica.

Si nos fijamos en su nomenclatura, nos queda más claro a qué se refiere XGSPON, donde X es simplemente 10 en números romanos, G hace referencia a Gigabit, S quiere decir que las velocidades son simétricas y PON, como ya sabemos, hace referencia a la red de fibra óptica. Por lo que, estamos ante una tecnología que nos ofrece 10 gigas simétricos de fibra óptica y aumenta la velocidad de Internet en los hogares, multiplicando por diez la velocidad de 1 Gbps que nos ofrecían las compañías hasta ahora.

Aunque aún no tenemos dispositivos domésticos que puedan trabajar con estas velocidades, y las redes se encuentran en un proceso de construcción y desarrollo, esta tecnología es el futuro y la tendremos pronto funcionando en nuestros hogares, ofreciendo una conectividad mucho más fluida y permitiendo la conexión simultánea de una gran cantidad de equipos en casa.

Tecnología WiMAX

Con WiMAX estamos ante una tecnología de comunicaciones inalámbrica, que se utiliza para proporcionar una conectividad de banda ancha a largas distancias. Esta se ha desarrollado para ofrecer una alternativa a la tecnología por cable. Gracias a su alcance, puede ser más recomendada para lugares donde es complicado que llegue la fibra óptica. Está basada en la norma IEEE 802.16, y se utiliza alrededor de todo el mundo en zonas rurales y remotas. Su gran ventaja es el alcance, el cual puede llegar a los 50 kilómetros desde una única estación base.

Otra de sus ventajas, es la capacidad de proporcionar acceso a Internet de alta velocidad a muchos usuarios de forma simultánea. Lo cual se consigue a través de la tecnología MIMO, que permite que los usuarios compartan la misma conexión de una forma eficiente. Por otro lado, es muy escalable, lo cual quiere decir que puede ser utilizada para implementar a gran escala en zonas urbanas o incluso a nivel metropolitano. En todo caso, en estos lugares es más común la fibra óptica.

A pesar de que es una tecnología muy buena para determinadas zonas, no ha conseguido la popularidad en cuanto a adopción como otras tecnologías. El LTE y el 5G, son las principales en este sentido. Esto puede ser en parte, debido a que el WiMAX necesita de la instalación de una infraestructura y equipos de red que son más costosos. Lo cual hace que la inversión necesaria sea demasiado grande para muchas empresas, incluso para usuarios particulares en muchos casos.

Y por último, tenemos el rendimiento. WiMAX no puede ofrecer las mismas velocidades que las tecnologías más actuales. Como el 5G. Lo cual hace que no sea tan adecuada para servicios, los cuales requieren grandes cantidades de ancho de banda. Siendo esta otra de sus mayores desventajas.

Cuándo no es recomendable

Aunque la tecnología WiMAX ha sido ampliamente adoptada y utilizada en diversos escenarios, existen algunos casos en los que no se recomienda su implementación. A continuación, se mencionan algunos de estos casos:

  • Uso doméstico de bajo alcance: Si bien WiMAX puede proporcionar una cobertura inalámbrica a larga distancia, no es la mejor opción para entornos domésticos de tamaño pequeño o mediano, donde otras tecnologías como Wi-Fi son más adecuadas. WiMAX se desarrolló principalmente para cubrir áreas extensas, como zonas rurales o urbanas densas.
  • Requerimientos de baja latencia: WiMAX, debido a su diseño y arquitectura, puede tener una latencia más alta en comparación con otras tecnologías inalámbricas como Wi-Fi o 4G LTE. Por lo tanto, en aplicaciones donde la baja latencia es crítica, como juegos en línea o transmisiones en tiempo real, puede no ser la opción más adecuada.
  • Implementaciones de alta densidad de usuarios: Si se requiere un gran número de usuarios simultáneos en una pequeña área, como en estadios o grandes eventos, WiMAX puede no ser la mejor opción debido a las limitaciones de capacidad. En tales casos, tecnologías como LTE o 5G pueden ofrecer un rendimiento superior y una capacidad más alta para manejar la carga de usuarios.
  • Movilidad extrema: Si se requiere una conectividad inalámbrica en dispositivos en movimiento constante, como vehículos en alta velocidad o trenes de alta velocidad, WiMAX puede no ser la opción más adecuada. Las tecnologías móviles como LTE o 5G están diseñadas específicamente para ofrecer una conectividad estable y continua a altas velocidades.
  • Implementaciones de corto alcance: En escenarios donde se requiere una cobertura de corto alcance y alta densidad de dispositivos, como en entornos urbanos densos o edificios de oficinas, es probable que WiMAX no sea la opción más eficiente. Tecnologías como Wi-Fi o soluciones de red de área personal (PAN) pueden ofrecer una mejor experiencia y rendimiento en tales casos.

En general, aunque WiMAX ha sido ampliamente utilizado en diversas aplicaciones y entornos, existen situaciones en las que otras tecnologías inalámbricas pueden ser más adecuadas y eficientes. Es importante evaluar cuidadosamente los requisitos y características de cada escenario antes de decidir la implementación de WiMAX o cualquier otra tecnología inalámbrica.

Internet por satélite

La conexión a Internet vía satélite es una tecnología de conexión de banda ancha que utiliza satélites para proporcionar acceso a Internet a través de señales de radio. Las principales ventajas de la conexión a Internet vía satélite son las siguientes:

  • Accesibilidad: Una de las principales ventajas es su accesibilidad en áreas lejanas o rurales donde las conexiones cableadas llegan. El uso de satélites significa que se puede proporcionar conexiones de banda ancha en cualquier lugar, independientemente de la infraestructura de comunicaciones con la que cuenten en el lugar.
  • Velocidad: La conexión a Internet vía satélite es capaz de ofrecer velocidades de descarga y carga rápidas y constantes, lo que permite la descarga y transmisión de contenidos de gran tamaño, de una forma accesible y eficiente. La velocidad de conexión a Internet vía satélite no depende de la ubicación del usuario, lo cual indica que la velocidad no se reduce a medida que se aleja de una zona de cobertura.
  • Conexión ininterrumpida: La conexión a Internet vía satélite es resistente a las interrupciones y al clima, lo que hace de esta una conexión ideal para su uso en áreas que experimentan condiciones climáticas que pueden ser complicadas. Por otro lado, la conexión a Internet vía satélite también es útil en situaciones de emergencia, ya que no le afectan estas adversidades.
  • Flexibilidad y posibilidades: La conexión a Internet vía satélite es muy flexible, lo que permite a los usuarios personalizar su plan y adaptarse a sus necesidades con las que cuentan y necesitan cubrir. Los planes de servicio de conexión a Internet vía satélite suelen ser más asequibles en comparación con otras tecnologías de conexión a Internet como la fibra óptica o conexiones 4G o 5G.
  • Múltiples usuarios: La conexión a Internet vía satélite también permite el uso simultáneo de múltiples dispositivos, lo que significa que diferentes personas pueden acceder a Internet de forma simultánea sin que se vea afectada la calidad de la conexión.

Cuándo utilizar internet por satélite

El internet por satélite es una opción de conectividad, la cual utiliza los satélites en órbita para proporcionar un acceso a Internet a las zonas más remotas o rurales. Donde de por sí, el cable no puede llegar hasta el momento. En todo caso, hay algunas circunstancias donde el Internet por satélite es recomendable. Estas son:

  • Zonas rurales o remotas: La expansión de la red de fibra óptica es algo que ha avanzado mucho. Pero lo cierto es que hay algunas zonas donde esto por el momento, es muy complicado que llegue. Por lo cual la conexión por satélite es una muy buena opción, siempre que no tengamos cable por satélite. En estas situaciones, el satélite puede ser incluso la única opción que puede ser viable.
  • Actividades móviles: Hoy en día hay muchas actividades que no dependen de un lugar físico, como pueden ser los campamentos, sin ir más lejos. El internet por satélite es una buena opción para aquellos que necesitan acceso a Internet en movimiento, donde las conexiones terrestres no son prácticas ni viables. Incluso es algo que se puede instalar en autocaravanas, o vehículos corporativos que se encuentren correctamente adaptados a las necesidades de la conexión.
  • Accesos de emergencia: En caso de desastres naturales o emergencias, disponer de conexión por satélite puede proporcionar una conectividad de respaldo para mantener la comunicación y la coordinación entre todos los cuerpos que intervengan en la situación que se ha dado.
  • Empresas y otras organizaciones: Las empresas y organizaciones que operan en zonas muy remotas o rurales pueden encontrar el internet por satélite una opción más rentable que construir una infraestructura de redes terrestres costosa. Lo cual es muchos casos es inviable debido a la propia geografía, o que a la compañía no le compense esa inversión para la ganancia que puede tener. Lo cual ocurre mucho más de lo que pensamos.

Cuándo no utilizar internet por satélite

Existen algunas circunstancias donde no dar uso de la tecnología por satélite, nos va a ayudar. Aquí el problema puede estar en lugares donde sea necesario, ya que por lo general esta tecnología se implementa más en lugares donde no queda más remedio que utilizarla. Por lo cual puede ser una decisión muy complicada el decidir no utilizarla. Ya que puede ser la diferencia entre tener conexión a Internet o no tenerla. En todo caso, si podemos encontrarnos algunas funciones donde no es recomendable.

  • Opciones terrestres: Es la más obvia de todas y la primera que se debe mencionar. Siempre y cuando tengamos opciones vía terrestre como puede ser la fibra óptica, no se recomienda en absoluto la conexión por satélite. En este caso la mejoría en cuanto a velocidades y latencia sería muy notoria. Y por lo general, pueden ser bastante más baratas.
  • Restricciones presupuestarias: Disponer de un acceso a Internet vía satélite puede ser costoso. Esto hace que, si trabajamos bajo presupuesto, no sea del todo recomendable utilizar esta opción. La mantendremos siempre y cuando no se tenga más remedio que utilizarla.
  • Baja latencia: Existen muchas actividades donde disponer de una latencia muy baja marca la diferencia, por lo cual solo tenemos una conexión posible. La fibra óptica. En estos casos la conexión por satélite será más un problema que una solución, de cara al rendimiento que podemos sacar de algunas aplicaciones.
  • Clima: Con las conexiones por satélite, podemos tener problemas cuando el clima es desfavorable. Pueden darse interrupciones del servicio, así como degradaciones de la calidad de la conexión en momentos importantes, cuando hay tormentas o incluso lluvias intensas.
  • Ancho de banda elevado: Al igual que la latencia, muchas funciones requieren disponer de un ancho de banda bastante elevado. Por lo cual estamos ante algo que requiere una conexión de fibra óptica. En estos casos, el satélite es mucho más justo en todos los sentidos. Por lo cual, no podremos manejar grandes cantidades de datos de forma simultánea.

Principales diferencias entre los Mbps de subida o de bajada

Seguramente hayas escuchado en más de una ocasión el término «velocidad de subida» o «velocidad de bajada». Esto hace referencia a la capacidad que tiene tu red para cargar o descargar datos. Mejor explicarlo con un ejemplo para que entiendas el concepto. Para empezar, los Mbps de subida hacen referencia a esos momentos en los que subes algo a Internet. Por ejemplo, cuando cuelgas una foto en Facebook. Luego están los Mbps de bajada, que hace referencia a los momentos en los que descargas algo. Por ejemplo, cuando ves una película en Netflix utilizas tu velocidad de bajada.

Megas simétricos y megas asimétricos

Otro concepto importanhte es la simetría o asimetría de tu conexión a Internet. Este término hace referencia a las diferencias entre la velocidad de subida y de bajada. Con una conexión ADSL, es normal que la velocidad de subida sea menor que la de bajada, ofreciendo una conexión asimétrica. O lo que es lo mismo: no hay problema para ver una película online, pero si quieres ser el servidor de un juego online, por lo que tienes que estar enviando paquetes de datos de forma constante, la velocidad de sumida limitada del ADSL no será precisamente tu mejor aliado.

Switch conectado a la red

En cambio, la mayoría de tarifas de fibra son simétricas, por lo que la velocidad de subida y de bajada es exactamente la misma. Si por ejemplo tienes 300 megas simétricos, la velocidad será igual para descargar paquetes como para enviarlos. Una conexión perfecta para el ejemplo anterior en el que quieres ser el servidor de un juego online.

¿Qué es Mbps de bajada?

Ya hemos hablado en alguna ocasión de la velocidad de subida y bajada. En este caso, la velocidad de descarga de Internet es el tiempo que tarda la información en llegar a nosotros desde Internet. Es decir, hablamos del lapso en que la información va desde los servidores de Internet hasta nuestro ordenador o móvil.

Por otro lado, tenemos la magnitud de velocidad de carga o subida, bastante olvidada por los operadores en sus anuncios. En este caso, la velocidad de carga es el tiempo que tarda la información en llegar desde nuestro PC o móvil a Internet. Esta velocidad es clave para actualizar una web, subir un vídeo a YouTube, publicar fotos en Instagram y cualquier actividad similar.

En este caso Mbps de bajada, megabit por segundo (Mb/s, Mbit/s o Mbps) hace referencia a una unidad que se usa para cuantificar un caudal de datos equivalente a 1000 kb/s. Aunque se habla de velocidad, lo cierto estamos ante el tiempo necesario para recibir un volumen determinado de datos una vez el primero ha alcanzado su destino.

Existe confusión entre megabit (Mb) y megabyte (MB), conocido popularmente como mega. Las empresas de Internet hablan de megas cuando en realidad son megabits por segundo (no megabytes por segundo. Para que nos hagamos una idea, sirva este ejemplo:

8 Mbit/s = 1 MB/s

12 Mbit/s = 1,5 MB/s

¿Cuál es el significado de Kbps?

El significado de Kbps es el de kilobit por segundo. Estamos ante una unidad de medida que se usa en telecomunicaciones, y también en informática, para determinad la velocidad de transferencia de información a través de una red de comunicaciones. La podemos abreviar como kbps y su símbolo estándar internacional es kbit/s. La abreviatura kb/s corresponde a kilobit por segundo, y no debemos confundir con Kb/s.

tabla mbps

Aquí tenemos que entender la relación 1 Mbps = 1000 Kbps, no obstante, existe bastante confusión porque las operadoras utilizan en ocasión la denominación “mega” o miden la información en bytes (KB = kilobytes, MB = megabytes). Por ejemplo, una conexión de 6 megas ofrece una descarga máxima de 750 KB/s. Si vemos una oferta de un proveedor de acceso a internet que ofrece 2.000 kbps has de saber que es lo mismo que 2 Mbps.

¿Cuánto es un mega en kbps?

Volvemos al tema del uso comercial de mega para referirse a una unidad que en realidad son megabit por segundo (Mb/s, Mbit/s o Mbps). En realidad, 1 mega equivale a 1000 Kbps asumiendo que estamos convirtiendo entre kilobit/segundo y megabit/segundo. El problema viene cuando introducimos los MB/s (megabyte o MB) que no utilizan el sistema decimal.

En este caso, 8 Mbit/s equivalen a 1 MB/s y a partir de ahí podemos hacer todos los cálculos necesarios para convertir a kbps y a otras unidades utilizadas para la medición de la velocidad en Internet. Aunque como ya hemos explicado, es el tiempo necesario para recibir un volumen determinado de datos una vez el primero ha alcanzado su destino.

¿Qué quiere decir 50 Mbps?

Una conexión de 50 Mbps nos ofrecerá 50000 Kbps de velocidad o tiempo en llegar los datos a su destino. En este caso, estaríamos hablando de una conexión de fibra óptica básica que nos puede ofrecer esa velocidad de bajada o bien de bajada y subida si es simétrica. Las escasas limitaciones de la tecnología FTTH aconsejan ofrecer siempre simetría a los usuarios. Para convertirlo a megabyte por segundo, obtendremos una velocidad de 6,25 MB/s.

R8500

¿Qué significa Mbps en un router?

Volvemos al concepto de “velocidad” de las operadoras. Si vemos Mbps en algún lugar del router, estamos, a buen seguro, ante la tasa de transferencia que tenemos disponibles para descargar y carga en Internet. En el caso de la red local, es la velocidad entre los ordenadores, siendo lo habitual 100 Mbps en Fast Ethernet o 1000 Mbps en Gigabit Ethernet. Es muy importante no confundir todo esto con los «Megabits» o «Megabytes». En 8 bits, tenemos un byte. Por lo cual una velocidad de 8 Mbps, es lo equivalente a transferir 1 Megabyte por segundo. Pero esta medida, según va aumentando en los dispositivos hace que sean más caros. Y esto es por varios motivos.

El primero es por la tecnología más avanzada, donde al tener mayor velocidad es porque incorpora tecnología más nueva. Estos se diseñan para poder manejar estas velocidades, lo cual también hace que los componentes de hardware necesiten ser más potentes e incluso sofisticados. Por otro lado, está el mayor ancho de banda. Los routers se crean para manejar velocidades mayores, por lo cual deben soportar un ancho de banda mayor. Esto es muy útil cuando realizamos actividades que tienen cierto consumo de ancho de banda. Como puede ser el streaming, o los videojuegos online. Por lo cual este es otro motivo por el cual son más caros.

Por otro lado, es muy común que cuenten con otras funcionalidades añadidas. Pueden ser las dobles bandas, o incluso triple, tecnologías como MU-MIMO, capacidades de QoS, entre otras muchas. Todo esto hace que el rendimiento general del dispositivo sea mucho mejor, más consistente. Pero incluso a pesar de que muchos routers pueden alcanzar velocidades muy altas en condiciones ideales, siempre habrá equipos que pueden ofrecer una calidad mayor. Lo cual por supuesto, hace que sean más caros. Pero ya estaríamos hablando de equipos de alta gama.

Y por último está la vida útil. Cuando los routers están diseñados para poder generar altas velocidades, también suelen estarlo para ser mucho más duraderos. Si se adquiere un routers de alta velocidad ahora, es probable que este sirva por muchos años. Incluso lo seguirá haciendo con una muy buena calidad de conexión. Lo que no ocurre si compramos equipos que incluso para el presente, a pesar de que cumplen, están más limitados.

¿Cómo es el Internet de 2 megas?

Para finalizar, vamos a responder a una pregunta que lamentablemente se sigue realizando. Internet de 2 megas, asumiendo que hablamos de 2 Mbps, es una conexión bastante precaria con tecnología ADSL u equivalente. Con el actual despliegue de fibra que tenemos en España, y en otros países, es complicado explicarle a alguien que debe conformarse con esa velocidad.

Velocidad bajada subida ADSL

Como hemos comentado en alguna ocasión, es una velocidad que nos da para navegar por Internet y usar el correo electrónico. Es totalmente insuficiente para servicios más avanzados como el juego online, la realidad virtual o los vídeos bajo demanda de plataformas como YouTube o Netflix.

Diferencias entre ancho de banda y velocidad de Internet

Hay dos términos que en muchas ocasiones pueden confundir a los usuarios. Cuando hablamos de ancho de banda hay que indicar que no es lo mismo que velocidad de Internet. Son cosas diferentes, aunque en ambos casos, a su manera, podamos cuantificar la capacidad de nuestra conexión. Por ello vamos a explicar qué es cada término y cuáles son las diferencias. Así comprenderemos mejor la información que obtenemos a la hora de contratar un servicio de Internet donde nos muestran cantidades que a veces hacen referencia al ancho de banda y en otras ocasiones a la velocidad de Internet.

Qué es el ancho de banda

En primer lugar vamos a explicar qué es el ancho de banda de una conexión. Podemos decir que es la capacidad máxima de una red. Es la cantidad máxima de datos que vamos a poder transferir en un tiempo determinado. Siempre podemos poner el ejemplo de una tubería de agua. El ancho de banda sería lo máximo que soporta esa tubería. Podemos tener una tubería más grande que otra y de esta forma poder soportar más o menos agua. Con el ancho de banda podemos decir que es similar, ya que mientras mayor sea, más datos podremos transferir al mismo tiempo.

ancho de banda internet

El ancho de banda será lo que soporta nuestra conexión. Por ejemplo Gigabit Ethernet va a soportar hasta 1000 Mbps o 1 Gbps. Fast Internet únicamente soportaría hasta 100 Mbps como máximo. Esto significa que si tenemos contratada una velocidad superior a ese límite, no podríamos disfrutar realmente de dicha velocidad.

Un buen ejemplo lo vemos en los televisores actuales.  Las Smart TV ofrecen conectividad Ethernet, pero de forma bastante limitada, por lo que hay veces que hace falta un adaptador de red que ofrezca un mayor ancho de banda para que puedas exprimir tu conexión a Internet y ver películas en 4K a través de plataformas de contenidos bajo demanda.

Qué es la velocidad de Internet

Por otra parte tenemos la velocidad de Internet. Es un término diferente, como vamos a ver. Podemos decir que es la velocidad a la que se transfieren los datos a través de un determinado medio. Podemos medirla tanto en velocidad de subida como de bajada. Es lo que tenemos contratado con nuestro operador.

Si por ejemplo tenemos contratada fibra óptica de 300 Mbps, esos 300 Mbps es la velocidad de Internet. Es la velocidad máxima a la que se va a transferir la información en la red.

Podemos ver que hay relación entre ancho de banda y velocidad de Internet, aunque no es lo mismo. Si no tenemos un ancho de banda suficiente no podríamos optar por la máxima velocidad de Internet. Si volvemos al ejemplo de la fibra óptica de 300 Mbps y tenemos un ancho de banda Fast Internet, que está limitado a 100 Mbps, no podríamos tener más que esa velocidad.

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