Fortnite Fortnite se ha convertido en una de las grandes revelaciones del último año. Este juego de supervivencia ha conseguido el favor de millones de usuarios en todo el mundo pero, en la otra cara de la moneda, nos encontramos con un crecimiento muy rápido en el que no se han solventado algunos problemas. Entre los fallos más comunes y que repercuten directamente en los jugadores, nos encontramos con cierres inesperados o paradas en la conexión a Internet a través de la cuál se accede a las partidas. En la guía que os mostramos a continuación, os diremos más sobre cómo acceder y abrir de manera correcta a los puertos del router disponibles para Fortnite y los errores que pueden aparecer.
Actualmente, tanto los juegos que tienen modalidades online como las propias plataformas en las que se ejecutan, desde las videoconsolas, hasta los ordenadores, requieren configurar este elemento. NAT son las siglas de «Network Address Translation» y, a grandes rasgos, es una herramienta que unifica a todos los dispositivos que, en este caso, estén conectados a un mismo servidor para jugar a una partida online, eliminando la necesidad de asignar una IP a cada uno de ellos y permitiendo que la comunicación entre todos sea con el mismo lenguaje. Gracias a la NAT, las partidas ganan estabilidad y permiten usar opciones como los chats de voz.
Cuando algo coge fama en Internet, es un blanco más atractivo para los hackers. En el caso de Fortnite, nos hemos encontrado en los últimos meses con las vulnerabilidades que provocan dos objetos maliciosos: Meltdown y Spectre. A esto, se añadiría un consumo de recursos excesivo que no podría ser soportado por equipos más antiguos o conexiones a Internet que no fueran del todo rápidas. De ahí que los desarrolladores de este título lanzaran una serie de parches y también, emitieran unas recomendaciones para poder sacarle el máximo partido.
A continuación os contamos más sobre los requisitos que son necesarios para que podáis exprimir Fortnite sin sobresaltos. Necesitáis una conexión de banda ancha que, según la Comisión Federal de Telecomunicaciones de Estados Unidos, debe partir de los 25 mbps para descargas y los 3 mbps para subidas. La velocidad para los juegos online es importante, aunque no lo es todo.
Además, tendremos que habilitar los puertos correspondientes de la siguiente manera si estamos en un equipo con Windows: accedemos al Panel de Control, y de ahí a Sistema y Seguridad y por último a Firewall de Windows. A continuación, entramos en «Configuración Avanzada» y seleccionamos la opción «Reglas de entrada«. Después, en esta opción, marcamos «Nueva regla» y en este comando, entramos en «Puerto» y pinchamos en «Siguiente». Nos aparecerá un cuadro de texto junto a la opción «Puertos locales específicos» en el que tendremos que introducir los números que previamente habréis conseguido realizando un test de puertos abiertos.
¿Alguna vez habéis tenido problemas para sacar el máximo partido a los juegos en red? Os dejamos disponible otra guía relacionada para mejorar la velocidad de estos títulos. Para poder jugar a través de Internet sin cortes ni altos retrasos es necesario que nuestra red tenga acceso a algunos determinados puertos utilizados para comunicarnos tanto con los servidores de como con los demás jugadores. Gracias a esta herramienta vamos a poder comprobar fácilmente el estado de estos puertos en nuestro router, donde ya hemos incluido los que deben estar abiertos para Fortnite: 53, 80, 443, 5795, 99, 5222, 5800 y 5847.
De forma predeterminada los routers domésticos traen la gran mayoría de puertos cerrados. Únicamente están abiertos aquellos que son necesarios para funciones y herramientas básicas para poder tener conexión. Esto es así por seguridad, ya que el hecho de tener los puertos abiertos podrían ser utilizados por piratas informáticos para acceder al router. Sin embargo en ocasiones, como hemos visto, es necesario abrir algunos para que todo funcione correctamente. Es el caso de Fortnite y otros juegos. Ahora bien, ¿por qué es esto así?
Esto es así ya que determinadas aplicaciones o juegos, en este caso Fortnite, necesitan hacer uso de una serie de puertos para que la conexión funcione correctamente. Si esos puertos están cerrados podríamos tener problemas para acceder al servidor, podría haber fallos, lentitud de carga, etc. De esta forma, al abrir esos puertos necesarios todo funcionaría mejor.
Son muchos los factores que pueden afectar a la velocidad de Internet, a lograr una conexión adecuada y no tener problemas. Por ejemplo si nos conectamos a la red por Wi-Fi debemos hacer uso de amplificadores o repetidores si la cobertura no es la mejor y así poder tener una velocidad más correcta. Pero también, como hemos visto, los puertos podrían ser determinantes para algunos casos, como los juegos o aplicaciones que necesiten que estén abiertos.
Aunque a simple vista pueda parecer que navegar por Internet es un proceso rápido y sencillo, realmente no lo es. Cuando introducimos una URL en el navegador, pulsamos la tecla Enter y esperamos a que se cargue. Sin embargo, Internet no funciona realmente así.
Cuando contratamos una conexión de Internet para nuestro casa o negocio, el técnico que hace la instalación no se complica la vida y siempre busca el punto más cercano a la calle para realizar la instalación del router, sin preguntar al cliente o analizar la zona que cobertura que tiene que cubrir.
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