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Son los nombres, tecnologías, funciones y herramientas que podemos encontrarnos al navegar por Internet. Un ejemplo es lo que conocemos como el Internet de las Cosas. Como sabemos son todos los dispositivos que están conectados a la red y que forman parte de nuestro día a día en el hogar. Por ejemplo una televisión, una bombilla inteligente o un reproductor de vídeo en Streaming. Ahora bien, existen otros tipos de dispositivos, de términos que encontramos en Internet. En este artículo vamos a centrarnos en uno de ellos. Vamos a explicar qué es el Internet de las Nano-Cosas o IoNT.

Qué es el Internet de las Nano-Cosas

Como hemos mencionado, el Internet de las Cosas son los dispositivos físicos que tenemos en nuestros hogares. Son cosas de nuestro día a día. Por ejemplo un televisor, una bombilla inteligente o cualquier otro equipo que esté conectado a la red. Esto es algo que cada vez está más presente en nuestro día a día. Podemos encontrarnos con más y más equipos conforme avanza el tiempo y las previsiones es que aumenten considerablemente en los próximos años.

Ahora bien, también hay otra terminología que hace referencia a otro tipo de dispositivos. Siempre, claro está, teniendo la red o Internet como referencia. Vamos a hablar de qué es el Internet de las Nano-Cosas o también conocido simplemente como IoNT.

El Internet Nano-Cosas son sensores y dispositivos muy pequeños, a escala nano, y que pueden transmitir información y datos. Básicamente podemos decir que es la unión entre Internet y la nanotecnología. Esto nos abre un abanico de posibilidades muy interesante, ya que en este caso su diminuto tamaño permitiría estar disponible en numerosos equipos y aportar muchas posibilidades al día a día de los usuarios.

En definitiva, el Internet de las Nano-Cosas va a estar cada vez más presente en nuestro día a día. Van a ir surgiendo más y más dispositivos de este tipo que nos acompañará en nuestro día a día.

¿Qué tipo de dispositivos podemos encontrar de este tamaño? Las posibilidades son múltiples, como hemos mencionado. Por ejemplo podemos encontrar drones minúsculos, sensores de movimiento, de videovigilancia, interruptores… Cosas que, como hemos visto, tienen un tamaño realmente diminuto pero que pueden aportar muchas posibilidades a los usuarios.

Qué es el Internet de Bio-Nano-Cosas

Hay una variante que se denomina Internet de Bio-Nano-Cosas o IoBNT. Sigue el mismo patrón que mencionábamos anteriormente, solo que en esta ocasión se trata de organismos biológicos y también sintéticos, de tamaño minúsculo, que pueden formar parte de nuestras conexiones.

Este subcampo del Internet de las Cosas está en una fase emergente. No es algo que forme parte de nuestro día a día en la actualidad. Sin embargo puede tener una presencia bastante importante en un futuro. Va a estar condicionado al avance de la tecnología, de los diferentes dispositivos que surjan y, como es lógico, de las utilidades que le podamos dar.

Este tipo de tecnología podrá adaptarse a los medios de comunicación del mundo real, de los dispositivos conectados a Internet en definitiva.

Estas células vivas ya responden a los estímulos de su entorno a través de campos electromagnéticos, luz, tensiones de temperatura y presión mecánica, hacen reemplazos efectivos para sensores basados ​​en chips debido a su sensibilidad adicional. Pueden tener una función muy importante para la ciencia y la salud. Por ejemplo pueden servir para el monitoreo en la atención médica, microchip en el cuerpo humano, etc.

En definitiva, el Internet de las Cosas y los subconjuntos que podemos encontrar van a estar cada vez más presentes en nuestro día a día. Cada vez tenemos más equipos conectados a la red y que nos aportan un abanico de posibilidades importante.

Siempre debe estar presente la seguridad. Ya sabemos que hay muchos tipos de ataques que pueden poner en riesgo nuestra seguridad. Muchas amenazas en forma de malware y ataques llevados a cabo por piratas informáticos con el objetivo de robar nuestras credenciales e información personal. Es vital que tengamos siempre los equipos actualizados y con los últimos parches de seguridad. Esto hay que aplicarlo a todo tipo de equipo, pero en lo que se conoce como el Internet de las Cosas es fundamental. También es importante cambiar los valores que vienen de fábrica y así tener una barrera de seguridad extra.