Wardriving, la moda de cazar redes WiFi desde un coche
La explosión de los dispositivos conectados lo ha cambiado todo, incluso nuestros hábitos y aficiones. Una de las más curiosas, provocada por la existencia de millones de redes WiFi a nuestro alcance, es el Wardriving. Esta moda de cazar redes WiFi desde un coche o cualquier vehículo en movimiento es todo un fenómeno y cada vez son más los usuarios que se apuntan. Incluso existen plataformas para colgar los datos conseguidos en la cacería. ¿Queréis saber más? Os contamos todo tras el salto.
La Wikipedia describe el Wardriving como “a búsqueda de redes inalámbricas Wi-Fi desde un vehículo en movimiento. Implica usar un coche o camioneta y un ordenador equipado con Wi-Fi, como un portátil o una PDA, para detectar las redes. Esta actividad es parecida al uso de un escáner para radio”. Términos similares son Warwalking o warjogging, donde la actividad se realiza andando o corriendo.
¿Wardriving? Origen de la palabra
El término Wardriving tiene su origen en la palabra wardialing. Esta técnica, popularizada en la década de los 80 y 90, consiste en hacer llamadas de forma automática a una serie de números de teléfonos con la intención de encontrar módems conectados a Internet. De esta forma, se intentaba establecer conexión con otros ordenadores.
Sin duda, muchos recordamos con nostalgia y cariño la película Juegos de guerra (WarGames) donde un joven accede a un ordenador militar donde la realidad se mezcla con los juegos, lo que le pudo llevar a iniciar la Tercera Guerra Mundial. Esa es una de las películas que marcaron la infancia de muchos y que ha ayudado a dar nombre a la moda de cazar redes WiFi.
No es un concepto nuevo, pero está de moda
Además de basar su nombre en una técnica de hace muchos años, el Wardriving lleva algún tiempo de actualidad en los cientos de páginas de Internet que se hacen eco de ello. Esta serie de artículos de El Lado del Mal fueron publicados en 2009 para contar más detalles sobre esta técnica aplicada a Windows Mobile. Tal y como nos comentan, el Wardriving empezó a popularizarse a principios de siglo, cuando Peter Shipley, consultor de seguridad de la Universidad de Berkeley, California, estuvo 18 meses realizando esta actividad con su coche.
Los resultados de este experimento fueron presentados posteriormente en las conferencias hacker DefCon 9. En un primer momento, el Wardriving dio lugar al Warchalking. Básicamente, se trataba de un lenguaje de símbolos que identificaba la existencia de una red inalámbrica en un punto concreto. Estos se dibujaban con tiza en las paredes o espacios similares. La siguiente imagen nos muestra los símbolos y sus significados.
Hacia un proyecto más global
La tiza demostró no ser el mejor método para dejar constancia de la existencia de puntos WiFi. Además, no se puede actualizar de forma remota y requiere la presencia física para cualquier actividad. Esto hizo que se adoptaran algunos modelos online para guardar todos los datos y mostrarlos de forma ordenada. Con ello nace WiGLE, una base de datos online que se apoya en Google Maps.
WiGLE, de Wireless Geographic Logging Engine, almacena y muestra sobre un mapa los datos recopilados por los usuarios, disponiendo de versión para escritorio y aplicaciones web que cualquier puede utilizar. Actualmente, admite datos de DStumbler, G-Mon, inSSIDer, Kismac, Kismet, MacStumbler, NetStumbler, Pocket Warrior, Wardrive-Android, WiFiFoFum, WiFi-Where o Wigle Wifi Wardriving.
El proyecto empezó en 2001 cuando lo normal era encontrar redes WiFi sin ningún tipo de protección. La recopilación de todo esto de forma pública en Internet ayudó a los usuarios a entender la necesidad de proteger sus conexiones. Mucho hemos evolucionado hasta el momento actual donde la seguridad está por encima de todo.
Los datos de esta web también han servido para proyectos de investigación, para la realización de encuestas o para la confección de artículos periodísticos. También le ha ayudado a muchos usuarios a encontrar redes a las que conectarse en una determinada y ha supuesto un entrenamiento para miles de usuarios que se han lanzado a la caza de las redes.
Vale, me gusta, pero ¿cómo empiezo en el Wardriving?
Lo cierto es que todo esto se ha simplificado enormemente con la aparición de los smartphones. Aunque podemos seguir recurriendo a un método más tradicional que consiste en llevar nuestro portátil con una antena externa y algún software como NetStumbler para Windows, Kismet para Linux y KisMac para Macintosh, lo más sencillo es recurrir a un terminal Android.
Existen varias aplicaciones que podemos utilizar, aunque Wigle Wifi Wardriving es la que nos recomiendan desde el portal donde podremos subir los datos posteriormente. Se trata de una aplicación gratuita sin publicidad que nos permite iniciarnos en el Wardriving, bien vayamos en coche, bicicleta o caminando.
¿Conocíais el Wardriving? ¿Lo habéis practicado en algún momento?
Cómo tener Internet en cualquier lugar
Hemos hablado de en qué consiste el Wardriving, una técnica para cazar redes Wi-Fi desde el coche. Ahora vamos a hablar de cómo podemos tener una conexión en cualquier lugar, ya sea que estemos de viaje en un autobús, tren o simplemente en un parque donde no hay una red Wi-Fi disponible cerca. Tenemos una serie de opciones disponibles.
Compartir datos con el móvil
Una opción muy sencilla para tener conexión de Internet en cualquier lugar es a través de nuestro móvil. Podemos compartir datos y acceder desde otros dispositivos, como podría ser un ordenador, una tableta, etc. Es un método que podemos utilizar desde la mayoría de móviles actuales, ya que es una función disponible en Android y también en iOS.
Hay que tener en cuenta dos factores: el consumo de batería y de datos. Lógicamente estamos usando la red del móvil para que actúe como un router, con lo que eso supone en consumo energético. También hay que tener en mente el consumo de la tarifa de datos que tengamos contratada.
Router Wi-Fi 4G
Tenemos también la alternativa de contar con un router Wi-Fi 4G. Básicamente lo que hacemos es insertar una tarjeta SIM en el router y podrá ofrecer conexión inalámbrica a otros equipos que no tengan acceso a la red. Es algo muy útil cuando nos encontremos de viaje o en circunstancias en las que no haya una red inalámbrica estable cerca.
Normalmente estos dispositivos tienen una autonomía de 6-8 horas. Algunos pueden llegar a durar algo más. Para un trayecto medio en tren o autobús, por ejemplo, puede ser una solución muy interesante.
Dongle USB
Por otra parte, podemos hacer uso de un dongle USB. Es similar a un router Wi-Fi 4G, pero en este caso se conecta a través del puerto USB y va a dar Internet a un ordenador. También habrá que insertar la tarjeta SIM. Tiene la desventaja de que no podremos conectar directamente otros equipos, más allá de ese ordenador que estamos usando.
No obstante, un dongle USB es una alternativa que puede ser de utilidad en muchos casos. Es económico y sencillo de utilizar. Puede ayudarnos a tener conectividad desde cualquier lugar
- Archivado en
- Banda Ancha